El tatuaje de Pratto que hace alusión a la Libertadores 2018

Los goles de Lucas Pratto en la final de la Libertadores 2018 quedarán para siempre en la memoria de los hinchas millonarios. Y no solamente porque uno de ellos fue en la Bombonera sacando del medio, y otro en la cancha del Real Madrid. Los goles del Oso fueron decisivos para que River pudiera festejar ante los ojos del mundo la consagración en la final más importante de la historia.

Así como ningún hincha de River podrá borrar de su memoria aquellos goles, Pratto tampoco podrá borrar de su piel lo que obtuvo en Madrid: el Oso /?utm_source=ig_web_copy_link" target="_blank" rel="noreferrer noopener">se tatuó la Copa Libertadores y la fecha de aquella noche tan especial para los hinchas de River.

Sus declaraciones antes de volver a Vélez

Tras rescindir su contrato con River, Lucas Pratto volvió al Vélez Sarsfield, club donde se había desempeñado entre el 2012 y el 2014. En agosto, en diálogo con Playersnet, el delantero revivió su inolvidable paso por el Millonario y recordamos algunas de sus declaraciones:

“River en mi carrera fue muy importante, porque logré a nivel deportivo lo más importante a nivel continental que es la Copa Libertadores, además por cómo se dio, dejando en el camino a clubes grandes de Argentina, al último campeón de la Copa, jugar la final contra el clásico rival, y encima no es cualquier clásico, es uno de los más importantes del mundo. River fue el mejor momento de mi carrera deportiva, lo esperé mucho tiempo junto con jugar en la Selección”

“Cuando te hacen un gol, obviamente que no te gusta, menos en una final y cuando va 0 a 0, encima habíamos creado 6 o 7 situaciones clarísimas antes del gol de Boca y que con un remate al arco se hayan puesto en ventaja. Pero apenas veo que encara el Pity, nosotros no solíamos jugar para adelante (el saque del medio) y Magallán hizo un movimiento para adelante que me dejó el espacio entonces piqué el Pity me la tiró, fue todo en un segundo, en ese momento no pensas”

“El gol de Madrid fue más entendible porque ya veníamos buscando el gol, el segundo tiempo era todo nuestro. Se caía de maduro que venía el gol porque en el segundo tiempo Boca no pasaba la mitad de la cancha, ya estaban cansados y nosotros estábamos muy bien físicamente. Me acuerdo del festejo, cuando empaté el partido me entró una tranquilidad y me relajé pensando en que estábamos en partido y sabía que iba a ser todo nuestro porque tenía esa tendencia”.