Con la finalización de la competencia oficial, y a la espera de los últimos amistosos, repasamos el año de River desde lo estadístico.

Luego del cierre de la Liga Profesional de Fútbol, con la victoria ante Racing, el Millonario despidió el año competitivo más irregular del ciclo. Los números de River en el 2022 no son tan malos como podría imaginarse, de hecho finalizó tercero en la tabla anual con 76 puntos.

Las fallas en los momentos claves explican el hecho de que, el conjunto dirigido por Marcelo Gallardo, se haya quedado con las manos vacías. Fue de los equipos que más puntos obtuvo, uno de los mejores promedios de puntos y el que más goles marco en el fútbol argentino.

Los números de River en el 2022

En el que fue, para muchos, el peor año del ciclo tan exitoso comandado por el Muñeco, River demostró, desde los números, ser uno de los mejores equipos del país. El Millonario disputó una totalidad de 54 encuentros de los cuales rescató el 65,2% de los puntos en juego. Incluso fue el más goleador -85 goles- y uno de los menos goleados -42- dentro de la liga.

Las eliminaciones, en Copa de la Liga ante Tigre y en Octavos de Libertadores ante Vélez, dejaron afuera de ambos frentes de manera temprana a River. De igual manera en amos torneos fue contundente, principalmente, en el certamen internacional donde en fase de grupos ganó 5 de 6 encuentros y empató el restante.

En la Liga Profesional, finalizada este lunes, sufrió haber dejado puntos en partidos accesibles y, desde la derrota en el clásico ante Boca, se vio un equipo endeble. De hecho, la mayoría de los tantos perdidos fueron en este torneo donde fue derrotado en 8 ocasiones e igualó en 5 cotejos.

Con estos números, River cerró un año competitivo sin logros y dejó un sabor amargo de cara al futuro. La sumatoria da un total de 54 encuentros oficiales, 31 victorias, 10 empates y 13 derrotas. No son malos datos, teniendo en cuenta el porcentaje de puntos ganados -65,2%-, pero el hecho de haber fallado en partidos importantes (Tigre, Vélez, los clásicos y Patronato) lo marginó de la chance de aspirar a algún título.